sábado, 20 de marzo de 2010

El Nombre del Viento. Crónica del Asesino de Reyes: primer día

“He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y he escrito canciones que hacen llorar a los bardos.
Me llamo Kvothe. Quizá hayas oído hablar de mí.”


El nombre del viento es la ópera prima de Patrick Rothfuss y ya quisieran muchos escritores que su primer trabajo fuera la mitad de bueno que éste. Se presenta como una trilogía, de la que de momento sólo tenemos la primera parte.

El argumento parece sencillo, un hombre convertido en leyenda se dispone a narrar la historia de su vida, la que sólo él conoce y desde el principio. Contarla entera le llevará tres días. Este primer tomo es el primer día de dicha narración, su infancia y adolescencia, los inicios, de dónde viene y qué lo hizo convertirse en lo que terminó siendo.

Hay miles de adjetivos que podrían calificar esta novela pero uno de los más destacados es sin duda: adictiva. Desde el principio te mantiene intrigado, mostrándote un poquito y haciendo que te preguntes mucho más. Entonces sigues leyendo y cuando quieres darte cuenta estás a punto de terminarlo. También es absorbente, desde que lo abres hasta que vuelves a cerrarlo desapareces del mundo real y te sumerges de lleno en la historia de Kvothe, tanto que incluso te sientes volver a la realidad en los pequeños interludios en la posada, claro que sigue sin ser la realidad real. Ya me entendéis. Hay momentos en que estás metido en una historia dentro de una historia dentro de otra historia. ¿Lioso? Para nada, eso te hace profundizar en la lectura de una manera asombrosa.

Los personajes son misteriosos, al principio sabemos poco sobre ellos pero se intuye una gran complejidad, a medida que vamos avanzando vamos descubriendo más matices y les vamos dando forma a sus personalidades.

El estilo de narración es en tercera persona mientras están en la posada, en el presente, y en primera persona en la narración de Kvothe de sus días pasados. En ambos casos es una escritura sencilla, que suena sincera y directa, y en ocasiones muy poética y llena de verdades.

Sin duda alguna lo recomiendo. Todo el mundo debería leer El Nombre del Viento, me parece una historia original, mágica y llena de la vida misma.

El único punto negativo que puedo sacarle es en realidad algo positivo también. Sabe a poco. Llegas al final y te quedas con ganas de más, sabes que no ha terminado y ese “continuará” te deja la miel en los labios y odiando las trilogías y las entregas en distintos tomos. La espera hasta poder leer la segunda (y después, tercera) parte es lo peor. El lado bueno de esta espera (siempre hay que ver el lado positivo) es que habrá más, dos tomos más de esta genial historia, más Kvothe y sus andanzas, más palabras tejiendo una historia que ya nos ha atrapado y que promete ser incluso mejor. Como el mismo Kvothe dice “ahora ya tenemos todo el trabajo preliminar hecho. Los cimientos sobre los que construir la historia.”
Booktrailer:



Patrick Rothfuss
Título original: The Name of the Wind. The Kingkiller Chronicle: Day One
Autor: Patrick Rothfuss
Editorial: Plaza Janés
ISBN: 9788401337208
Número de páginas: 872

Reseña de la segunda parte: El Temor de un Hombre Sabio

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